La calificadora Fitch reveló la nota soberana de riesgo crediticio de México en “BBB-“ con perspectiva estable. Sin embargo, advirtió que las reformas constitucionales propuestas, como la del poder judicial, llegaría a indicidir e incluso a afectar la institucionalidad del perfil crediticio.

Durante el comunicado, la agencia destaca que, “la calificación está limitada por débiles indicadores de gobernabilidad, un historial de crecimiento económico moderado a largo plazo así como por los riesgos fiscales relacionados con pasivos contingentes de la empresa pública Petróleos Mexicanos (Pemex) y crecientes rigideces presupuestales”.

La calificación de México para Fitch aparece en el nivel más bajo del Grado de inversión, que es el “BBB-“ y así se mantiene desde abril del año 2020.

La calificación, por un lado, indica a los inversionistas que el emisor soberano dispone de un grado de inversión con riesgo de impago relativamente bajo para un horizonte de calificación de 3 a 5 años, tal como lo destacó el mes pasado, el director de análisis soberano para América Latina, Carlos Morales, según la información de EL ECONOMISTA.

Con el objetivo de entregar más detalles sobre el comunicado, los analistas de Fitch argumentaron que el paquete de reformas constitucionales donde sobresale la modificación del poder judicial tendrá un impacto negativo en el perfil institucional de México. Ahora bien, agregaron que es aún temprano para evaluar la severidad que llegaría a disponer su implementación.

“La reforma propone someter a elección popular a los miembros de la Suprema Corte de Justicia, magistrados y jueces locales y de distrito y creemos que esta propuesta afectará negativamente al panorama institucional. Pero es temprano para conocer cual será el potencial del cambio aprobado”, confirmaron.