“Ellos sí pudieron mirar el cielo”, es el título del libro que narra la historia de lucha de los trabajadores de la compañía hulera transnacional Euzkadi en el Salto, Jalisco. Una experiencia incansable de resistencia, organización y valentía, que sin duda, ha dejado un precedente para la defensa y reconocimiento de los derechos laborales en Jalisco y en todo el país.

Este caso se presentó en el año 2001 y a pesar de contar con él y otros valiosos ejemplos, nuestro México de 2019 se sigue quedando corto en el camino para convertirse en un país de derechos, uno en donde no tengamos que exigir y no tengamos que apelar al respeto a los mismos, porque ya han de ser garantizados, sin distinción alguna de clases, de edades, etc.

Los múltiples pendientes en materia de derechos, han propiciado que diversas luchas para el acceso y la defensa de los mismos se mantengan en distintas partes del país; desde los habitantes de comunidades en la zona de la huasteca, San Luis Potosí, quienes exigen se garantice su derecho al agua y saneamiento, a proteger sus tierras, al medio ambiente y a su propia identidad; pasando por las mujeres que buscan su derecho a decidir; hasta las miles de personas que luchan a diario por el acceso a la justicia, ese que debiera ser el mínimo garantizado por el estado mexicano de manera igualitaria, pero que hasta ahora, se reduce a ser privilegio para unos cuantos, alejándose precisamente de la esencia de un estado de derecho.

Y así podemos seguir enlistando la situación en que se encuentran la mayoría de los derechos en el país, más allá de lo que esté contemplado en la constitución y en nuestro sistema democrático. Es claro, entonces, que nos sobran razones para continuar y reforzar la exigencia de su cumplimiento, en absoluta libertad.

Por ello me parece importante visibilizar y reconocer las acciones que realizan cada una de las personas y organizaciones comprometidas con abonar a la discusión, la propuesta y la vigilancia del reconocimiento efectivo de los derechos.

Precisamente la AMEDI (Asociación Mexicana de Derecho a la Información) Capítulo Jalisco, cumplió un año más de trabajo, celebrándolo con la publicación del libro “Diez años de lucha por el derecho a la información en Jalisco: 2008-2018”, en donde algunos de sus integrantes narran los temas y acciones que han trabajado durante estos años, por medio de exigencia, articulación social, seguimiento legislativo, etc, para impulsar las bases de derecho a la información y libertad de expresión que ahora tenemos en la entidad, y por las que poco a poco hemos avanzado en el ejercicio de nuestro derecho a saber, sin dejar de identificar los pendientes que aún quedan por atender.

Una constante que reflejan las experiencias de la AMEDI Jalisco en la lucha por tener un país de acceso a derechos, es que si no estamos atentos a que éstos se garanticen desde las leyes y hasta cada uno de nuestros espacios, siempre existen riesgos de retroceder.

Por eso es necesario trabajar unidos, tejiendo redes que nos permitan encontrar mecanismos para que las autoridades e instituciones nos escuchen, y para que cada vez menos personas se tengan que topar con caminos escabrosos para el cumplimiento de los derechos que les corresponden.

En Jalisco y en todo México tenemos múltiples ejemplos de compromiso, unión y esperanza. Reconozcamos y reforcemos la causa de otros, solo juntos podremos construir un país en el que todas y todos podamos mirar el cielo de los derechos y las libertades.