Con el objetivo de garantizar las medidas sanitarias para inhibir la proliferación del COVID-19 entre comerciantes y consumidores, el Gobierno de Guadalajara desplegó un operativo de supervisión en los tianguis El Baratillo y Polanco, que esta mañana retomaron sus actividades.

El coordinador general de Desarrollo Económico y Combate a la Desigualdad, Juan Manuel Munguía, informó que “este domingo fue permitida su instalación y estamos trabajando de la mano en un ejercicio de corresponsabilidad de los comerciantes y del Ayuntamiento para controlar filtros de ingreso”.

Añadió que para hacer frente a la emergencia sanitaria, es importante que los clientes acaten las medidas sanitarias, por lo que lanzó un nuevo llamado a utilizar “cubrebocas, a que venga solamente una persona a hacer sus compras y, sobre todo, que se respeten los pasillos y no existan acumulaciones de personas.”

Asimismo, como parte de la esta estrategia de prevención, este domingo no se instaló el tianguis de Tetlán. En la zona en la que habitualmente opera, estuvo presente personal tapatío para reforzar la difusión de las medidas preventivas.

En los operativos de supervisión participaron alrededor de 150 servidores públicos de dependencias como las direcciones de Tianguis y Comercio en Espacios Abiertos, Inspección y Vigilancia, Movilidad y Transporte, la Tesorería de Guadalajara y la Comisaría tapatía.

La administración encabezada por el Presidente municipal de Guadalajara, Ismael Del Toro Castro, recuerda que la operación de los tianguis está regida por el semáforo epidemiológico y la información que arroja el mapa que identifica las zonas del municipio con mayor riesgo de contagio, al tiempo que subraya que en el proceso de reactivación económica, la salud de la población es la prioridad.