Ya pasó un año de que la cadena productiva del limón en la región de Apatzingán, Michoacán, se fuera a paro, ayer (lunes 12 de agosto) se repitió la historia. Los productores, comercializadores, empacadores e industriales, indicaron estar hartos de las extorsiones.

Mediante un comunicado, personas dedicadas a esta y otras actividades relacionadas con la cosecha de este cítrico en los municipios de Buenavista y Apatzingán, indicaron que desde ayer habría una suspensión en la recolección y el corte de la fruta.

También indicaron que, no habrá reanudación de trabajos hasta que las autoridades estatales implementen las estrategias para que les garanticen la seguridad.

“Seguimos con la problemática del aumento de cuotas y amenazas por parte del crimen organizado. Y estaremos en paro general hasta que el gobierno nos dé las garantías de seguridad y protección a nuestro trabajo y patrimonio”, destacaron en el comunicado.

Una de las fuentes consultadas por LA SILLA ROTA explicó que ahora deben pagar el doble del impuesto tributario criminal y multas de hasta un millón de pesos, a quienes no alcanzan a cubrir el cobro de piso.

Los involucrados en la cadena de la fruta argumentaron que las extorsiones van desde 3 hasta 4 pesos por kilo de limón producido, empacado y comercializado, que es la “cuota”, fijada por la organización delictiva.

Como era de esperarse, dichas extorsiones a los que trabajan en la cadena del limón tiene consecuencias a nivel nacional, ya que el precio del cítrico subió en todos los estados. Lo anterior, afecta a los hogares, bares y restaurantes mexicanos.