La inflación en México alcanzó en febrero su nivel más bajo durante 11 meses, ya que se ubicó en 7.62% anual, dato que resultó más positivo al 7.67%, que preveía el mercado.
Ahora bien, los analistas expresaron que dicha cifra debe ser analizada con precaución debido a la persistencia de presiones en los servicios.
Vale destacar que, los datos le entregan un margen de tres semanas a Banxico para su anuncio de política monetaria, en la que instituciones financieras tienen previsto que suba la tasa de interés en 25 puntos base para posicionarla en un 11.25%.
Asimismo, analistas llegaron a la conclusión aún hay datos que deben ser analizados, tanto en la economía mexicana, como en la estadounidense y hay que estar atentos a lo que haga la Reserva Federal.
Por otro lado, la moderación en la inflación respondió a la desaceleración en el índice subyacente, que llegó a 8.29% anual, y por la no subyacente, que se posicionó en 5.65%, la más baja en dos años, de acuerdo a la información que entregó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
En su comparación mensual, la inflación avanzó 0.56 por ciento, menor al 0.68 por ciento que se reportó en enero, y mejor a la expectativa de 0.61 por ciento.
Alejandro Padilla, director general adjunto de análisis económico y financiero de Grupo Financiero Banorte, destacó que a pesar de la desaceleración, es necesario mantener el apretamiento monetario.
”El panorama de la inflación sigue siendo bastante retador a pesar de esta disminución en la métrica anual; esto requerirá que el banco central continúe con los incrementos a la tasa de interés”, declaró Padilla a El Financiero Bloomberg.