El pasado lunes 19 de agosto empezó el paro de trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) en todos los estados; en cuanto a Ciudad de México, tomaron las instalaciones del Palacio de Justicia Federal de San Lázaro, y ayer (miércoles 21 de agosto), fueron los jueces y magistrados de México los que se sumaron a esta histórica suspensión de labores como consecuencia del rechazo a la reforma constitucional propuesta por el presidente AMLO.

Una de las razones de López Obrador para reformar al PJF es que los jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tienen sueldos muy altos, incluso por arriba del suyo a pesar de que las leyes lo prohíben; además, les acusa de tener ‘privilegios’ y de estar al servicio de las élites empresariales y políticas, pero nunca al lado del pueblo.

Por lo tanto, Andrés Manuel López Obrador propuso que sean elegidos mediante votación popular y ya no a propuesta del presidente con la posterior aprobación del Senado; entre otros puntos que han sido muy cuestionados, también se prohíbe reducir el número de ministros, eliminar fideicomisos y dejar explicado en la ley que ningún trabajador del Poder Judicial de la Federación puede ganar más que el presidente de la República.

Una vez estalló el paro de labores en el primer minuto del pasado lunes 22 de agosto, el presidente AMLO pidió a los trabajadores que no se dejaran desinformar y manipular, porque la Reforma al Poder Judicial está lejos de afectarlos, pues los beneficiaría. Sin embargo, los empleados que no son jueces, magistrados y ministros no consideran que sea cierto lo que propone López Obrador y destacan que, de aprobarse la iniciativa, su carrera judicial sí corre peligro.

El secretario y abogado del PJF, Gibrán Zazueta, compartió a través de su cuenta de X (antes Twitter) varias reflexiones sobre la suspensión de labores y el rechazo a la Reforma al Poder Judicial.

Acerca de la pregunta de “¿en qué les afecta a los trabajadores la reforma?”, Zazueta aclara que ésta eliminaría su proyecto de vida llamado carrera judicial: “No todo en esta vida es el dinero (para muchos parece que sí), también existe el propósito y la vocación de vida. Para mí, como para miles de mis compañeros nuestra legítima aspiración es llegar a ser jueces y juezas, magistrados o magistradas. Para ello se necesitan años, décadas de experiencia en el Poder Judicial. Estudio, actualización, compromiso, etc”, destaca Zazueta.

“Actualmente se puede ser juez federal después de reunir cuando menos 5 años de experiencia como secretario y ganar un concurso de conocimientos contra miles de otros secretarios. En otras palabras, depende de uno mismo. Con la reforma dependerá de la política, no del mérito”, declaró Zazueta.

Ahora bien, respecto a los supuestos privilegios de los que gozan en el PJF, Gibrán Zazueta detalló que su salario, aguinaldo, vacaciones, apoyo de lentes, seguro médico y ahorro para el retiro son en realidad prestaciones laborales de ley.