- Columna de opinión.
- Escrita por: *Por Juan Eduardo López Morales.
“Sé también que sabrás disculparnos de que tomemos el pretexto de tu cumpleaños, para reunirnos hoy, tus amigos, tus colegas, tus compañeros universitarios, para tomar como un magnífico pretexto este día, porque nosotros no queremos conmemorar un día tan triste como el de tu muerte, nosotros queremos celebrar el día de tu vida, porque queremos celebrar tu vida, eso es lo que estamos celebrando” Con estas emotivas palabras el Mtro Trino Padilla, se dirigió al auditorio el pasado viernes 3 de mayo en la develación de la escultura en honor al ex rector de quien fue impulsor de la cultura y la educación en Jalisco, en la explanada de rectoría de la benemérita Universidad de Guadalajara.
Un merecido homenaje se rindió al Lic. Raúl Padilla López, en el día de su cumpleaños, con su brazo derecho sobre el corazón es el diseño que realizó el artista plástico Juan José Méndez Vega, este autor cabe destacar también realizó la estatua de Fray Antonio Alcalde, a un costado de esta reciente.
El legado que deja Padilla López es muy grande, ejemplos de ideas que se fueron consolidando por el paso del tiempo, la Feria Internacional del Libro, el Festival de Cine de Guadalajara, el Centro Cultural Universitario, por mencionar algunas obras relevantes.
El impulso a la creación y consolidación de la red universitaria, el gran mérito de llevar la educación media superior y superior a todos los rincones de Jalisco, con la consolidación de los centros universitarios regionales y la consolidación de innumerables escuelas preparatorias en el interior del estado.
Mencionó su hermano Trino, lo siguiente: “Contribuyó a ampliar los horizontes. Él era muy consciente de que todo esto, a pesar de que es su obra, era una obra colectiva. Él se asumió como el que encabezó los esfuerzos, él no creía que las obras las hacían los grandes hombres y mujeres, sino que toda obra perdurable es siempre una obra colectiva”.
Solamente las mentes brillantes y adelantadas a su época logran crear, consolidar y encabezar acciones en beneficio de los demás, de su comunidad y de su país, pocos universitarios, dejan huellas y acciones profundas en la búsqueda de un bien común.
El Lic, como era por muchos conocido y reconocido, será visto por siempre en el ingreso de Rectoría General de esta Casa de Estudio, y será parte visible de los visitantes y turistas que todos los días hacen recorridos en una tradicional calandria tapatía, su legado seguirá por muchas generaciones, porque trascendió en todas las acciones que realizó en vida por la educación y la cultura en Jalisco y en México. ¡Gracias por tanto, Raúl!
*El autor es politólogo por la UDG, con posgrado en Diseño de Información y Comunicación Digital. Analista político y docente en la Universidad de Guadalajara.
