La economía de México creció más de lo que preveían los datos preliminares en el tercer trimestre, con un gran “empujón” debido al fuerte gasto de los consumidores y el aumento de las exportaciones a Estados Unidos.
Según los datos oficiales publicados el viernes indicaron que el Producto Interno Bruto creció un 1.1 por ciento en el periodo julio-septiembre a comparación del trimestre anterior, por arriba de la mediana de las estimaciones de los economistas encuestados por Bloomberg del 0.8 por ciento y de la lectura original del 0.9 por ciento, que se informó en octubre del 2023.
Una vez se compara el mismo periodo del año anterior, el PIB se creció un 3.3 por ciento, por encima del 3.2 por ciento esperado.
Por otro lado, la segunda economía latina se benefició de dos factores puntuales:
- La fortaleza del mercado estadounidense.
- Las inversiones en operaciones de empresas que abastecen al vecino del norte, proceso conocido como nearshoring.
La solidez del mercado laboral y la alta demanda de los consumidores facilitaron el crecimiento. El presidente AMLO, también, se apresura a terminar una serie de proyectos, que serán de bastante impacto para el comercio de nuestro país.
