La inflación en México reportó un comportamiento no deseado y en la primera quincena de noviembre se aceleró a 4.32 por ciento anual, desde el 4.25 por ciento registrado en la segunda quincena de octubre, según los datos que difundió el Inegi.
Dicho dato llegó a estar por arriba de la expectativa del mercado, que pronosticó una tasa anual de 4.28 por ciento y registró su nivel más alto desde la segunda quincena de septiembre de 2023.
Diferentes analistas ya habían expresado que la inflación interrumpiera su trayectoria descendente en los últimos días del año. Sin embargo, prevén que la convergencia al objetivo puntual de Banco de México (Banxico) siga para el 2024.
Por otro lado, al llevar a cabo su comparación quincenal, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) exhibió un aumento de 0.63 por ciento, el más alto desde la primera quincena de noviembre del 2021.
“Seguimos creyendo que la debilidad emergente de la economía, las bajas expectativas de inflación y los bajos precios del petróleo ayudarán a mantener la inflación bajo control”, indicó Andrés Abadia, economista jefe para Latinoamérica de Pantheon Macroeconomics.
A pesar de la aceleración del INPC, se recalcó que la inflación subyacente, que ayuda a determinar el comportamiento de los precios en el mediano plazo al eliminar los precios más volátiles, se logró moderar a 5.31 por ciento anual, por lo cual, ligó 19 quincenas a la baja y presentó su nivel más bajo desde la segunda quincena de octubre del 2021.
