La deuda neta de México exhibirá una trayectoria de tipo alcista para los próximos años, desde 46.6% como proporción del PIB previsto en 2023 hasta 50.2% anticipado para 2028, de acuerdo a las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) en su Monitor Fiscal.
Dicha institución indicó que los ingresos del Gobierno de México aminoran su proporción acerca del PIB, sin que el menor gasto lo compense.
Los ingresos generales gubernamentales llegarían a representar el 23.7 por ciento del PIB en 2024, por debajo del 23.8% esperado para 2023, y 24.2% que representaron en 2022. De acuerdo a las expectativas del organismo, disminuirán hasta significar 23.3 por ciento del PIB en 2028.
En cuanto al gasto general, incrementará a 29.1 por ciento del PIB en 2024. Lo anterior, será la proporción más alta en una década. Empezará a ceder en 2025, al bajar a 26.3 por ciento, y se pronostica que llegaría a 25.9 por ciento en 2028.
