- Escrito por: Julio Ríos
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Dos polos opuestos se enfrentan: La prudencia reflexiva de Beatriz Paredes, contra la estruendosa simpleza de Xóchitl Gálvez. La primera, virtud que desgraciadamente no gana elecciones en un país de corta memoria, ni conciencia de la necesidad de políticas viables y sensatas. Un país donde pareciera más atractiva la jocosidad y el abuso de palabras altisonantes (porque supuestamente así hablan todos los mexicanos) no solo para construir “fenómenos electorales”, sino hasta para regresar a las audiencias a sintonizar de nuevo la televisión abierta.
La declinación de Santiago Creel para apuntalar la campaña de Xóchitl Gálvez tiene que ver con el crecimiento de Beatriz Paredes.
Un crecimiento que no debería sorprendernos. Si Beatriz hoy compite hoy de tú a tú, no se debe a una efervescencia súbita como la que acompañaba a Xóchitl, sino a una trayectoria de larga data. Ella ha labrado su camino, día a día, durante años para cuándo llegara este momento. No es llamarada de petate.
Además Beatriz tiene más contenido, profundidad y pertinencia en su discurso. Es de las muy escasas figuras que quedan en el PRI con prestigio y que cuenta con una visión progresista, pero sin radicalizarse. El tricolor se juega su mejor y última carta. La única, pues. Con la esperanza de que la gente olvide las afrentas del pasado, y muy a pesar de los personajes impresentables que controlan la cúpula del tricolor (algo que también pasa en el PAN con Xóchitl).
Sin embargo, decir que las preferencias de Enrique de la Madrid se van automáticamente a Beatriz, como si se tratara de canicas que cambian de frasco, es impreciso.
Tampoco es verdad que todas las simpatías que tenía Creel, se transfieren a Xóchitl así como así. En lo electoral las cosas no funcionan de esa manera .
Por eso, los próximos debates del Frente Amplio por México que se realizarán hoy en León y el jueves en Guadalajara adquieren gran interés. Estos polos opuestos otorgan gran atractivo a la campaña.
Y aunque es de perogrullo, hay que decir que México tendrá su primer presidenta en 2024, ya que sea Beatriz o Xochitl, la ganadora del Frente se enfrentará a Claudia Sheinbaum, la favorita en Morena y en las encuestas.
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