Para nadie es un secreto que Morena Jalisco trae una pugna intestina por el reparto de las candidaturas.

Es natural -aunque no justificable- que cuando llegan las posibilidades reales de triunfos, quede sepultado el romanticismo político y aparezcan las rebatingas. A veces con mayor intensidad que cuando se enfrenta al que se supone que sería el adversario ideológico.

Si bien ya se resolvieron las diputaciones locales (sin encuesta de por medio y con acusaciones de imposición), quedan los jaloneos rumbo a las presidencias municipales metropolitanas.

Vamos a tratar a continuación de explicar en qué consiste el desgarriate que traen en Morena.

1.- El Comité Nacional envío a inicios de enero a un delegado electoral. Se trata de José Narro, senador por el estado de Zacatecas. Se suponía que su labor era hacer trabajo político para buscar consensos y candidaturas únicas.

 

2.- Sin embargo, unos días después, el Comité Nacional envío también a Yeidckol Polevnsky, como delegada a inicios de febrero. Ella anunció en sus redes que era la delegada del CEN y con ello las aguas comentaron a agitarse.

 

3.- Unas semanas después, la Comisión Nacional de Elecciones envió a funcionarios partidistas de la Ciudad de México, para integrar un Comité de Elecciones, encabezado por Rafael Estrada Cano. Este Comité realiza entrevistas y exámenes de conocimientos a los aspirantes y estaturiamente, es la única instancia reconocida formalmente por el CEN. Ninguna otra.

 

4.- José Narro convocó a los siete líderes de las corrientes mas fuertes de Morena en Jalisco, para intentar llegar a consensos respecto a las candidaturas o en todo caso, sobre los nombres que deberán ser medidos en las encuestas.

 

5.- En esa mesa participan el dirigente estatal, Hugo Rodríguez Díaz; la senadora “Toñita” Cárdenas; la diputada federal, Laura Imelda Pérez Segura y el representante del colectivo La Vieja Guardia de Morena, Humberto Casián. También tienen un asiento, el representante de Morena ante la delegación local del INE y aspirante a la dirigencia nacional, Javier Falcón González; el dirigente magisterial y ex aspirante a la presidencia estatal del partido, Miguel de la Rosa Figueroa y el representante del Ala Democrática de Morena, Jaime Hernández Ortiz.

 

6.- Otros dos personajes que participaban en esa primera mesa, decidieron abandonarla. Uno es el regidor de Zapopan, Hiram Torres, quien representaba a la corriente de Carlos Lomeli. El otro es Juan Barajas Godínez, de la corriente del senador Alejandro Peña (quien por cierto es integrante de la Comisión Nacional de Elecciones). Ellos se sumaron a otra mesa convocada por Yeidckol Polevnsky.

 

8.- Ambas mesas palomearon su propia lista de propuestas de candidatos y nombres susceptibles de ser medidos en las encuestas. Estas fueron enviadas a la Comisión Nacional de Elecciones para que allá se decida. Sin embargo ninguna de estas dos mesas tiene validez jurídica

 

9.- Incluso en la primera mesa hubo desacuerdos. Jaime Hernández Ortiz anunció que cuatro representantes de corrientes manifestaron su rechazo a candidatos con orígenes priistas, panistas y emeceistas. Hernández Ortiz lo dijo flanqueando a José Narro, en una rueda de prensa en un hotel de la ciudad.

 

Las aguas se agitaron aún más porque el Comité de Elecciones, enviado por el CEN, registró ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) una lista de candidatos a diputados locales.

Diversos militantes subieron videos a redes sociales quejándose de que estas candidaturas se impusieron sin consultar a las bases Reprocharon que el CEN esperó deliberadamente hasta el último momento para registrar candidatos, pues el límite eran las 23:59 horas del domingo 15 de marzo.

En sus publicaciones, esos militantes inconformes acusan del supuesto madruguete al mismísimo dirigente nacional Mario Delgado y a la delegada Yeidckol Polevnsky. Reclaman que se ha ido desplazando a los que tenían trabajo en las calles luego de años de sacrificios para construir estructuras.

Con todo este río revuelto, es como Morena Jalisco llega a la última semana de definiciones para las candidaturas a las presidencias municipales.

Recordemos: Carlos Lomelí busca ser candidato en Guadalajara, y su grupo impulsa a Mariana Fernández en Zapopan y a David Hernández y Erika Pérez en Tlaquepaque. Por la corriente de Marcelo Ebrard (a la cual pertenece Mario Delgado) están Alberto Uribe en Zapopan, Claudia Delgadillo, en Guadalajara y Alberto Maldonado, en Tlaquepaque.
En ese mismo municipio, Laura Imelda Pérez Segura compite por la corriente de Alfonso Ramírez Cuellar y Alberto Alfaro es carta de Hugo Rodríguez Díaz y del senador José Narro.

El límite para el registro de planillas municipales, es a las 23:59 horas del domingo 21 de marzo y todo indica que el CEN esperará de nuevo hasta el último suspiro, para evitar que los descontentos se marchen a otro partido.

Esta historia, probablemente, tendrá más vuelcos en los próximos días.