Los pronósticos afirmaban que el envío de remesas a México bajaría para el 2020. Nada más alejado a la realidad.

Tan sólo en el primer trimestre del año, estas aumentaron casi un 20 por ciento, respecto al mismo periodo del 2019.

Pero en abril, las cifras sorprendieron más. La llegada de dólares a México aumentó en un 49 por ciento. El nivel, es el más alto registrado desde los atentados terroristas del 2001 contra los Estados Unidos. 

A decir del doctor Eduardo González Velázquez, las proyecciones de una menor entrada de dólares para México se atendían en la crisis por la que atraviesa el mundo y que el panorama en los Estados Unidos por la emergencia sanitaria de Coronavirus ha dejado sin empleo a más de 27 millones de personas; sin embargo el camino apuntó a la misma dinámica de las restricciones a los escenarios migratorios que cuando estaba Barack Obama.

“En principio el incremento de las remesas se comenzó a dar por la poca viabilidad que había en el escenario de una reforma migratoria, con Barack Obama, esto hizo que los migrantes en Estados Unidos lejos de estar guardando dinero allá con idea de llevarse a más familiares, comenzaron a mandar más dinero a nuestro país, porque hay que recordar que Barack Obama fue el presidente que más migrantes ha deportado en la historia de Estados Unidos, entonces estaba esta idea presente de la posibilidad de ser deportados en cualquier momento, y apostaron por tener más recursos en México que en los Estados Unidos, por eso fueron creciendo hasta ser 40 mil millones de dólares tan sólo el año pasado”.

A decir de González Velázquez el incremento en las remesas se origina en que a los latinos aún no se han visto afectados por los recortes en el empleo, y las medidas migratorias que está por imponer el gobierno de Trump.

“Llamó poderosamente la atención que se hayan incrementado, a mi me parece que fue por dos razones fundamentales, todavía la gran ola de desempleo que está viviendo los Estados Unidos no llega a sacudir de manera tan importante a los grupos migrantes como está sacudiendo a los grupos de estadounidenses, por otro lado, Donald Trump ha cerrado cada vez más las pinzas para la posibilidad a acceder a una estancia legal en Los Estados Unidos. Apenas ayer se anunció que el siguiente recorte será para negar la estancia posterior a estudios de jóvenes universitarios que saliendo de este nivel de estudios consiguieran alguna práctica en Estados Unidos, ayer se anunció que el siguiente paso es negarles esa estancia. En ese sentido, se están abriendo muchos frentes ara cerrar camino a los migrantes, entonces la idea de quedar en un proceso de deportación crece y por eso me parece que las remesas aumentaron considerablemente”.

Y aunque el pronóstico de la baja de hasta un 20 por ciento menos en la entrada de dólares al país será menor, los resultados siguen sorprendiendo.

“De hecho la proyección se mantiene: que este año las remesas pueden tener una caída del 20 por ciento, es decir un promedio de 7 u 8 mil millones de dólares menos a lo largo de todo el año”, comentó el académico.

Pero no es algo nuevo. A pesar de que la política anti-inmigratoria en Estados Unidos de América (EUA) ha agudizado sus controles, paradójicamente el fenómeno se veía sostenido, de 2008 a la fecha. En ese año fueron 26 mil millones de dólares los que se captaron. En 2019 se rompió el récord de remesas enviadas por los trabajadores mexicanos a sus comunidades de origen, pues se superó a los 38 mil millones de dólares acuerdo a cifras del Banco Mundial.

En los hogares que reciben remesas les representa entre 20 o 30 por ciento del ingreso corriente de las familias, con un promedio que no supera los 200 dólares por hogar, al mes.