El día 14 de abril teníamos 5 mil 399 casos confirmados de gente contagiada con Covid-19 y habían perdido la vida 406 personas. Ese día, en este espacio se publicó que “de acuerdo a la tendencia que se ha mantenido, se calcula que entre el día 22 y el 23 de abril, entraríamos en la fase de contagio en la cual cada día los nuevos casos se contarán por miles”.

Y efectivamente, la tendencia nos llevó a que este martes 21 de abril llegáramos a 9 mil 501 casos confirmados de personas contagiadas -de acuerdo al modelo Centinela de vigilancia epidemiológica- y 857 defunciones, por lo que el Gobierno Federal de México dio por iniciada la Fase 3 de la epidemia, lo que en palabras del Dr. Hugo López-Gatell Ramírez, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, implica que “hay mayor cantidad de contagios, que va a haber más pacientes, que va a haber más necesidad de camas de hospital y de terapia intensiva y lo que implica es que exista riesgo de saturación de los hospitales”.

Este es el gran riesgo: que haya tal cantidad de personas enfermas con necesidad de hospitalización, que el número de hospitales equipados para atender a enfermos por Covid-19 sea insuficiente en número de camas, respiradores para quienes requieran asistencia artificial para mantenerse con vida y en general que la capacidad instalada y recursos humanos no sean suficientes para brindar una oportunidad para vivir.

Pero para comprender mejor el cómo llegamos a esta fase de aceleración de la epidemia, veamos en perspectiva las cifras para comprender el reto: el primer contagio en México se reportó el día 27 de febrero. A partir de esa fecha pasaron 32 días para que se reportara un millar de casos, ya que el día lunes 30 de marzo, la Secretaría de Salud federal reportó mil 93 enfermos por Covid-19 y habían perdido la vida hasta entonces, 28 personas.

A partir de ese último lunes de marzo, pasaron ¡únicamente 6 días! para que se sumara otro millar de personas enfermas, ya que el día domingo 5 de abril, es decir, menos de una semana después, el reporte a nivel nacional fue de dos mil 143 personas enfermas y 94 fallecimientos.

Posteriormente, transcurrieron ¡únicamente 3 días! para que la cifra llegara a 3 mil 181 contagios confirmados y 174 la cantidad de personas que habían perdido la vida al miércoles 8 de abril. En 72 horas, el sábado 11 ya había más de mil personas más enfermas, con lo cual la cifra de enfermos llegó a 4 mil 219 y 273 muertes.

Transcurrieron sólo 48 horas más y el lunes 13 ya teníamos 5 mil 14 casos y 332 finados. A partir del martes 21, día en que se anunció la Fase 3, al menos cada 24 horas ha habido mil nuevos casos de personas enfermas y así llegamos a este viernes 24 de abril con 11 mil 633 personas contagiadas y más de mil muertes ocasionadas por Covid-19 y todo apunta a que terminaremos el mes de abril con más de 21 mil casos en todo México.

Los estados que más registran casos son: Ciudad de México, Estado de México, Baja California Norte, Sinaloa, Tabasco, Quintana Roo y Puebla.

En el caso de Jalisco, todo indica que las medidas adoptadas por el Gobierno estatal ayudaron a que actualmente no nos encontremos ni de cerca, a las entidades federativas que concentran el mayor número de casos pero debemos recordar que en este momento en que se acelera el proceso de contagios de manera exponencial, más que nunca debemos mantener la disciplina.

Si es imperativo salir de casa, una higiene escrupulosa, el uso de cubrebocas y la sana distancia serán las acciones que evitarán que se sature la infraestructura hospitalaria, que vayan a ser insuficientes los respiradores para quien llegara a necesitarlos y también muy importante, nos permitirá retornar quizá antes que el resto del país, a la actividad social que permita reactivar la economía porque una cosa es muy cierta: superando el inconmesurable desafío de la epidemia por Covid-19 la siguiente premisa es que no nos de un colapso nervioso por la angustia de no tener un trabajo que permita alimentar a la familia.

Lector, en RumboMx nos unimos al clamor general y te exhortamos a que si lo puedes hacer ¡quédate en casa!