Pedro Sánchez, el presidente del Gobierno español, calificó hoy (miércoles 25 de septiembre) de “inexplicable” e “inaceptable” la decisión del Gobierno mexicano de no invitar al rey Felipe VI a la toma de posesión de la nueva presidenta de nuestro país país, Claudia Sheinbaum.

Durante una comparecencia antes los medios en la Representación Permanente de España ante la ONU, donde asiste a la Semana de Alto Nivel de Naciones Unidas, Sánchez argumentó que España no puede aceptar esa exclusión y que por esa razón se decidió no enviar a ningún representante español a la toma de posesión.

Sánchez reveló su “frustración” por el hecho de que este desencuentro se produzca no solo “entre dos países hermanos” sino entre dos naciones gobernadas por fuerzas progresistas.

Una vez se le preguntó sobre si cree que España debe pedir perdón por su pasado colonial en México, como lo solicitó el presidente mexicano AMLO, Sánchez recalcó en que ya ha dejó en clara su posición al respecto al jefe de Estado mexicano.