La Conferencia del Episcopado Mexicano consideró que, bajo su criterio, la elaboración de los Libros de Texto Gratuitos de la SEP resultó “irregular”, porque no se siguió lo establecido dentro del marco legal. También, indicó que existió confusión e improvisación en muchos de los componentes de la nueva versión de los ejemplares.
A través de un posicionamiento a unos días de que los menores regresen a clases, la CEM detalló que no obstante, confían en la labor que desempeñan los maestros en el aula, quienes con su experiencia, formación y comunicación con los padres de familia podrán rescatar aquellos elementos importantes para sus alumnos.
Por ello, dejaron en claro que no comparten los criterios para quemar o destruir los libros de texto, pero sí están a favor de su mejoramiento y corrección, ya que “no podemos coincidir con posturas que absolutizan el error y que desconfían de la libertad y criterio del ser humano”.
En cuanto al contenido sexual, el Episcopado Mexicano destacó que prevalece una visión mecanicista y biologicista del ser humano. “Afirmamos que una verdadera educación pide una concepción integral del ser humano que reconoce, al mismo tiempo, el cuerpo y el espíritu, su dimensión histórica y trascendente, individual y comunitaria, entre otras características esenciales”.
“Por supuesto, creemos que es necesario enseñar sexualidad en las escuelas; sin embargo, debe hacerse con gradualidad, de acuerdo a la edad y madurez de los educandos desde los ángulos humanistas, tal y como lo propone la Nueva Escuela Mexicana, en sus campos formativos e interdisciplinarios y no en asignaturas aisladas”, concluyó.