Después de un par de semanas del fallecimiento de los migrantes en Ciudad Juárez, que fueron encerrados en una estación, el Instituto Nacional de Migración expresó mediante un informe a la Cámara de Diputados que en sus centros de alojamiento se otorga a los migrantes “instalaciones seguras, hospedaje, agua y alimentos, kits de higiene”, entre otros apoyos.
En el informe que se le entregó al Palacio Legislativo el 4 de abril, el INM aseguró que garantiza a los extranjeros que van rumbo a Estados Unidos “apoyo psicosocial para niñas, niños y adolescentes, mejoras en la infraestructura de albergues, insumos para la adecuada estancia de personas migrantes y refugiadas, el acompañamiento de los organismos internacionales para los nuevos albergues que las autoridades locales y estatales implementen para recibir flujos de personas migrantes”.
EL INM destacó que ofrece la “entrega de insumos para el fortalecimiento de las capacidades e infraestructura de la red de albergues en México; apoyo para compra de alimentos para albergues, respaldo para hospedaje, kits de higiene”.
También entregan “alternativas para personas migrantes y refugiadas y la coordinación con los tres órdenes de gobierno y los organismos internacionales para facilitar la inserción en México”.
Lo anterior, ocurrió como respuesta a una solicitud de los legisladores, mediante un punto de acuerdo, para que Secretaría de Gobernación, la Secretaría de Relaciones Exteriores, y el INM, en ejercicio de sus facultades, brinden continuidad a las acciones encaminadas a la bienestar, seguridad y protección de los sujetos migrantes que se encuentran en tránsito y refugiadas en el país, “así como para que se les brinde la atención adecuada, auxiliándose con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados”.
Vale destacar que, los migrantes detenidos en Ciudad Juárez permanecían –el 27 de marzo– en una de las estaciones migratorias más longevas, construida en 1995 y sin remodelaciones, con capacidad para 60 personas, pero donde había más de 80; no tenían alimentos ni agua.