Ante la urgente necesidad de que ni los derechos, ni la participación ciudadana se vean limitados en ninguna circunstancia (como la cuarentena por el Covid-19), esta semana recibimos buenas noticias en Jalisco.
El Consejo General del IEPC (Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Estado de Jalisco) aprobó dos asuntos clave para que se realicen ejercicios de plebiscito en la Zona Metropolitana de Guadalajara, uno en el municipio de Tlaquepaque y otro en Zapopan.
En el caso de Zapopan, se aprobaron los requisitos y se mandó la resolución al Consejo de Participación Ciudadana del municipio para que resuelva sobre la procedencia del ejercicio de plebiscito referente a privatizar un terreno público ubicado junto a los Arcos en el centro de Zapopan. En este caso, la solicitud se presentó en diciembre de 2019.
En cuanto al caso de Tlaquepaque, cuya solicitud trata el tema de una donación de terrenos en el Cerro del Cuatro, la situación ha sido más complicada, debido a que ya en una primera ocasión el Consejo de Participación Ciudadana del municipio declaró la improcedencia del ejercicio sin presentar argumentos y a pesar de que se cumplían los requisitos. Entonces, el IEPC rechazó la resolución y solicitó que el Consejo ciudadano aprobara el ejercicio (esto en enero de 2020). Tras varios meses de espera, el Consejo del IEPC aprobó enviar ahora un apercibimiento al Consejo de Participación Ciudadana, para que resuelva el asunto. La solicitud para este ejercicio se presentó en agosto de 2019 por lo que ya casi se cumple un año y aún no se le da resolución.
De acuerdo con el procedimiento establecido en la ley, el IEPC es quien se encarga de la validación de los requisitos y los hace llegar a los Consejos de Participación Ciudadana (en el caso municipal) para que éstos aprueben los mecanismos de participación y en coordinación con el Instituto se organicen los ejercicios respectivos.
En los dos casos a los que se hace referencia, los ciudadanos presentaron la intención de hacer realidad estos ejercicios ante actos de autoridad de los ayuntamientos con los que no están de acuerdo y consideran deben ser consultados con los habitantes del municipio.
En Jalisco, desde los años 90´s existen mecanismos de participación ciudadana institucionalizados, inicialmente se incluyeron en ley los tres más conocidos (referéndum, plebiscito e iniciativa popular), ahora tenemos 16 (tanto de democracia directa como representativa), lo cual no ha significado un avance sustantivo en el involucramiento ciudadano en los asuntos públicos.
Incluso, la mayoría de los mecanismos ni siquiera se han puesto en marcha, tal es el caso del plebiscito, que nunca se ha realizado en el estado, y los antecedentes que se tienen nos hacen pensar que los procesos burocráticos y la poca claridad en la responsabilidad de cada instancia, pueden desmotivar que las personas se interesen en estos ejercicios.
Contrario a lo que ha pasado en Jalisco, en 2019 en Chihuahua, teniendo un año con la ley de participación ciudadana que incluía el mecanismo, se realizó un ejercicio de plebiscito sobre la concesión del servicio de alumbrado público, alcanzando un alto grado de participación (poco más de 60 mil ciudadanos) y una respuesta favorable por parte de la autoridad municipal.
La mejor manera de conocer los alcances de los mecanismos de participación ciudadana es ponerlos en marcha y lograr pasar de la democracia representativa a una democracia participativa que nos permita tener un espacio clave en la toma de decisiones.
Para lograrlo, es fundamental que cada una de las instancias involucradas en estos procesos, se comprometan a promoverlos y no sean quienes pongan obstáculos a la participación.
Precisamente la labor de organismos como los Consejos de Participación Ciudadana de los municipios es ser una voz de la ciudadanía ante las y los gobernantes, y específicamente en cuanto a los mecanismos de participación, tienen la importante responsabilidad de declarar su procedencia. Por ello, es necesario hacer un llamado tanto a estos consejos como a las autoridades, de quienes esperamos escucha, legalidad, compromiso con los principios de la democracia y con lo público.
El valor de la participación ciudadana en cualquier nivel de gobierno, pero sobre todo en el ámbito que tenemos más próximo que es el municipal, es clave para exigir mejores gobiernos. No dejemos de alzar la voz para que los mecanismos de participación sean una forma tangible de que las voces ciudadanas estén siempre presentes y sean tomadas en cuenta.