Sorprendió que los dos diputados del Grupo Universidad votaran en contra del endeudamiento en Jalisco por 6 mil 200 millones de pesos. Aunque eso no evitó que la mayoría se los legisladores avalaran que la entidad adquiera el empréstito en el mercado bursátil.
La postura de los legisladores emanados de la UdeG, contrastó con lo ocurrido en las últimas semanas de emergencia por el coronavirus, esta institución había caminado de la mano y por el mismo carril con el gobernador Enrique Alfaro: recomendaciones de cuarentena, pruebas rápidas y críticas al Gobierno Federal, fueron algunos temas en los que ambos grupos políticos coincidían.
No obstante, Mara Robles Villaseñor y Enrique Velázquez González (cuadros forjados en el núcleo del padillismo) alzaron la voz en contra de la deuda durante la sesión del Pleno del Congreso Local el pasado viernes.
Pareciera que lo que hay de fondo en este rechazo a la deuda, es la molestia del Grupo UdeG por el recorte de 350 millones que quitaron al presupuesto a la Universidad, dentro de una estrategia del Gobierno de Jalisco para meterle tijera al gasto total de la entidad para lo que resta de 2020.
Es dónde surge la duda: ¿Es esto la antesala de un divorcio entre el Grupo UdeG y Alfaro? ¿O se trata de un pleito pasajero?
Lo que viene en puerta es la designación de Consejeros de la Judicatura (para los cuales, suena la versión de que dejarán con las manos vacías al Grupo UdeG) y el nombramiento de magistrados en el Supremo Tribunal de Justicia.
Es ahí, donde se puede marcar el punto de inflexión en la relación entre estos grupos, UdeG y Alfaro, relación que había sido tersa en los dos primeros años. Sí se arreglan en el reparto de Consejeros de la Judicatura y magistrados, esto habrá sido un pleito pasajero. Si los dejan con las manos vacías vendrá el divorcio.
Otro punto sobre la mesa: Tanto Mara Robles, como Enrique Velázquez, fueron quienes en su momento anunciaron la fundación de Hagamos, asociación que ya tiene en la bolsa el registro como partido político estatal, gracias a la operación de Francisco Díaz Aguirre, ex secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la UdeG y que coordinó las asambleas constitutivas y la recolección de firmas. Es decir, este grupo se ha venido preparando para seguir caminando en caso de romper con Movimiento Ciudadano y ante la decadencia del PRD, que por cierto, aún controla en Jalisco y que se pronunció también en contra del endeudamiento a través de un desplegado de su presidenta, Natalia Juárez Mirando. Llama la atención que Quirino Velázquez desobedeció está directriz del Sol Azteca y aprobó la deuda, con lo cual muchos auguran que es cuestión de tiempo para que cambie a la camiseta naranja.
Lo cierto, es que por lo pronto, el voto en contra de estos diputados debería tener muy inquietos a algunos funcionarios de mediano nivel que son cercanos tanto a Mara Robles como a Enrique Velázquez, y que fueron insertados en distintas secretarias como la de Desarrollo Rural y del Medio Ambiente, gracias a las gestiones de estos legisladores.
Algunos están inquietos porque traen en la frente el sello de estos diputados, como sus mentores. Es lógico pensar que en cualquier momento podrían salir de la administración estatal por la afrenta de sus padrinos políticos.