Estados Unidos y México acordaron luchar contra el desmantelamiento de las redes de tráfico de armas de fuego con el objetivo de combatir el fentanilo y reconocieron que el tráfico de armas de fuego aporta de gran manera a la destrucción y a la violencia en ambos lados de la frontera.
Mediante una declaración conjunta de ambos países después de la reunión que ayer (lunes 24 de julio) tuvieron el presidente AMLO y altos servidores públicos del Gobierno de México con una delegación estadounidense encabezada por la asesora de seguridad nacional, Elizabeth Sherwood-Randall, la subsecretaria interina de Seguridad Nacional, Kristie Canegallo y la fiscal general adjunta, Lisa Oudens Monaco, se acordó avanzar en la cooperación de ambos países para la lucha global contra las sustancias químicas de uso dual y el fentanilo, el combate al tráfico de armas, la modernización de la frontera compartida y la gestión de la migración.
Dicha reunión, se indicó en el documento, se basó en encuentros anteriores de alto nivel dirigidos por la asesora Sherwood-Randall y la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez Velázquez.
“Nuestros países también reconocen que descubrir, interrumpir y desmantelar las redes de tráfico de armas de fuego es fundamental en nuestros esfuerzos conjuntos para combatir el fentanilo ilícito, y estamos comprometidos a abordar el tráfico de armas de fuego que contribuye a la violencia y a la destrucción en ambos lados de nuestra frontera compartida”, detallaron.
Ahora bien, en la reunión de ayer en Palacio Nacional se discutieron los avances y retos en la cooperación respecto a la migración regional y se comprometieron a forjar una respuesta a nivel regional, guiada por los principios establecidos en la Declaración de Los Ángeles sobre Migración y Protección.
