Trump, un día de campo

• Columna de opinión.
• Escrita por: Edgar Olivares.

La carrera de Donald Trump para obtener la candidatura presidencial republicana será un día de campo. Tras la declinación del gobernador de Florida, Ron DeSantis a favor del exmandatario, Trump se fortalece y ahora solo tiene a una rival, la exembajadora de Estados Unidos en la ONU, Nikky Haley.

Este martes se realizan las primaras republicanas en New Hampshire, estado natal de Nikky Haley, donde espera recuperarse de la derrota en Iowa, donde Trump les puso una paliza tanto a Haley como a De Santis por casi 30 puntos.

Si Trump gana New Hampshire, vaticina el fin de la contienda interna. Así lo dijo en su discurso el domingo tras las declaraciones del gobernador DeSantis por la tarde. Mediante un mensaje en video, DeSantis aseguró que no hay un camino claro para su victoria por lo que abandonaba la carrera por la presidencia de Estados Unidos y además respaldaba a Trump. Dicho de otra manera, sus seguidores, en su mayoría, apostarán por el magnate.

Los seguidores de Nikky la ven con menos posibilidades ahora. El entusiasmo en su campaña y en su base cayó el domingo tras conocerse la sorpresiva decisión de Ron DeSantis. Prevén una maquinaria pro Trump en el Partido Republicano. Entrevistados por el New York Times, seguidores de Haley ven muy cuestarriba la contienda.

Ella en lo suyo. Tras la noticia del abandono de Ron DeSantis dijo que finalmente llegó lo que esperaba: una batalla de dos contendientes. Espera que su discurso menos radical y de lograr la unidad del país, permee en los republicanos menos radicales y que le den el apoyo por encima del expresidente Trump. Se ve muy difícil, porque en la mayoría de las encuestas, el promedio de ventaja de Donald Trump es de 40 puntos sobre sus rivales, lo que ahora podría ampliarse tras las declinaciones de De Santis, de Tim Scott y de Vivek Ramaswamy, los otros contendientes que decidieron abandonar su sueño de ser presidentes de Estados Unidos.

El martes podría concluir la interna republicana, con un Donald Trump fortalecido entre los seguidores del elefante (por el logo del partido) pero con varios casos judiciales en varias partes del país: Georgia, por su intento de cambiar los resultados electorales en 2020; Nueva York por presunta evasión fiscal y manipulación de cifras para obtener beneficios en créditos; también Nueva York por un presunto caso de abuso sexual contra una escritora; Miami, por el caso de documentos clasificados que se habría llevado de forma irregular tras abandonar Washington.

La disyuntiva será para el sistema de justicia y para Joe Biden: encarcelar a Trump y descarrilarlo de la contienda o dejarlo competir a sabiendas de que en las encuestas va arriba, incluyendo las mediciones contra Joe Biden, quien enfrenta descontento por su apoyo incondicional a Israel y por una economía que no termina por espantar a los fantasmas de la recesión y la inflación.

En noviembre son las elecciones presidenciales, marcadas por la incertidumbre y la división política del país.

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