El Gobierno de México emitió un nuevo decreto de acciones en cuanto al glifosato y maíz genéticamente modificado (transgénico) en el que destacó que la importación de este tipo de grano se permitirá para para uso industrial de alimentación humana y alimentación animal –exceptuando la producción de tortilla y masa–, siempre bajo la autorización de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Un decreto anterior, que se emitió en diciembre del 2020, marcó el 31 de enero del 2024 como fecha límite para la importación del maíz transgénico, pero no quedó claro si se hacía referencia al destinado para uso como el industrial, pecuario e industrial o aquel destinado al consumo humano.
Asimismo, el gobierno de Estados Unidos confirmó en diversas oportunidades a lo largo de los últimos meses que la aplicación de la disposición en México podría ser constitutiva de una violación del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), al tener una barrera fitosanitaria al comercio del maíz amarillo sin disponer de un fundamento científico.
Bajo ese contexto, el nuevo decreto, que se publicó ayer en la tarde (13 de febrero de 2023) en el Diario Oficial de la Federación (DOF), planteó la eliminación de la fecha del 31 de enero del 2024 como límite para finalizar las importaciones de maíz transgénico para usos pecuarios o industriales.
Poe otro lado, se expresó que se mantiene el objetivo de realizar la sustitución del maíz transgénico en México, pero ya no aparece una fecha crítica para dicho efecto.