El cierre del Tercer Informe de Gobierno del presidente López Obrador, sonó a una despedida anticipada y estuvo impregnada de cierto tono nostálgico.
Aunque el mandatario auguró que en 2022 saldrá fortalecido del ejercicio de Revocación de Mandato, insistió en que si tiene que irse, lo hará con la conciencia tranquila.“Como lo escribí en la introducción de mi nuevo libro que se llama, precisamente, “A la mitad del camino·, es tan importante lo logrado en este periodo que hasta podría dejar ahora mismo la Presidencia sin sentirme mal con mi conciencia, que es lo que estimo más importante en mi vida”, dijo.
Señaló que en estos tres años se han sentado las bases de la transformación de México y que lo conseguido, difícilmente será revertido por los neoliberales.
“¿Cómo podrían los conservadores, por ejemplo, quitar las pensiones a los adultos mayores? ¿Cómo podrían suprimirse las becas a los estudiantes pobres? ¿Cómo volver al lujo, a las extravagancias en el ejercicio del gobierno? ¿Cómo regresar a la condonación de impuestos a las grandes corporaciones económicas o financieras? ¿Cómo retornar a la privatización depredadora de los bienes públicos? ¿Cómo lograrían que volviera a imperar la corrupción? En fin, un retroceso no sería fácil”, aseguró López Obrador.
Considero que la gente va a votar a finales de marzo del año próximo porque continúe mi periodo constitucional hasta finales de septiembre de 2024.
Y fiel a su estilo, concluyó así:
“Desde luego no solo es esto lo único que necesito para concluir mi misión: falta lo que diga la naturaleza, la ciencia y el Creador, pero, si tengo suerte y termino mi mandato, creo que vamos a consumar la obra de transformación y no dejaremos ningún pendiente. Cuando esté entregando la banda presidencial solo diré a los cuatro vientos ¡Misión cumplida! Me voy a Palenque. Les dejo mi corazón”.