Con el grito de “somos la resistencia”, trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) estuvieron ayer (miércoles 4 de septiembre) a la sede de la Cámara de Senadores y destacaron que llegaron para quedarse hasta que se vote la reforma judicial.

Por otro lado, se manifestaron en el lugar estudiantes del Movimiento Generación del 24, pidiendo, sin éxito, ser escuchados por los legisladores.

Rafael Jiménez y Manuel Vázquez, trabajadores del PJF, y la juez de Distrito Lucero de Alba, expresaron, en entrevistas por separado con EL ECONOMISTA, que, a diferencia de lo que sucedió en la Cámara de Diputados, no impedirán que los senadores voten la reforma del Poder Judicial en su sede.

“No venimos a impedir que sesionen aquí, sino al contrario porque aquí existe la posibilidad de que no pase la reforma”, destacó Jiménez, quien trabaja en el Poder Judicial desde hace 22 años; actualmente desempeña labores en el Décimo Octavo Circuito del Segundo Tribunal Colegiado en Materia Laboral son sede en Cuernavaca, Morelos.

En ese sentido, Vázquez, que lleva 17 años trabajando en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN); confirmó que “la intención es estar acá informando a la gente y tratar de convencer a los legisladores de no aprobar la reforma (…) vamos a quedarnos aquí pero no vamos a bloquear ni a impedir que sesionen los senadores. En el Senado no hay mayoría calificada”.

También señaló que la reforma del Poder Judicial “afecta a México (…) Los daños son a México, nuestra defensa va más allá de defender nuestro empleo”.

De Alba, que jerce como jueza en Tlaxcala, pidió que “los 43 senadores” de oposición “se mantengan firmes ante lo que ofrecieron, no como los dos traidores del PRD”, en una clara referencia a los senadores, que decidieron sumarse a la causa de Morena.